Los hoteles de Cataluña recurren a medidas drásticas por la escasez de agua
por Marketing
La sequía y la aridez asolan la región desde hace tres años, mientras los embalses se secan lenta pero inexorablemente y el agua potable se convierte en un bien escaso. Barcelona, uno de los destinos turísticos más populares de Europa, se ve especialmente afectada por la sequía. El gobierno catalán hace un llamamiento a la conservación del agua. La situación no sólo afecta a la vida cotidiana, sino también al turismo. Los hoteles recurren ahora a medidas drásticas.
España: Las vacaciones en Cataluña también se ven afectadas por la escasez de agua
Carteles en Barcelona llaman a la conservación del agua. "¡Sequía! Ayuda a ahorrar agua", dicen, por ejemplo. O: "¡Ahorra agua! Ya no cae del cielo".
La situación es grave. El pantano de Sau, que antaño abastecía de agua potable a Barcelona, está ahora casi seco, como informa eltelediario alemán "tagesschau". El muro de la presa, antaño orgullosamente levantado, yace ahora seco y deja al descubierto los restos de una antigua iglesia y otros edificios. En realidad, sólo la torre de la iglesia debía elevarse por encima del agua del embalse. Lejos del agua, en la antigua orilla se puede ver el club de deportes acuáticos abandonado. Símbolos sombríos de la crisis actual.
La Generalitat de Cataluña declaró hace tiempo el estado de sequía y está tomando importantes medidas para reducir el consumo de agua. En todas partes se informa a los turistas de la precaria situación, ya sea en el aeropuerto, en el metro o en las habitaciones de hotel. Incluso se distribuyen folletos con consejos para ahorrar agua.
Los hoteles de Cataluña sufren la falta de agua y recurren a medidas
Muchos hoteles carecen ahora de enchufes en las bañeras para controlar el consumo de agua de los huéspedes. También se están tomando otras medidas, como pedir a los huéspedes que se laven los dientes con un vaso de agua o utilizar el botón de ahorro de agua en la cisterna del inodoro.
Pero no sólo el sector turístico está sufriendo las consecuencias de la sequía. La agricultura catalana también tiene que soportar restricciones masivas. Los árboles y las flores ya no se pueden regar con agua potable. Las fuentes se han apagado.
Los hoteles de Cataluña se enfrentan a un reto importante, sobre todo de cara a la próxima temporada de vacaciones. Algunos ya han reaccionado y están invirtiendo en plantas desalinizadoras para poder seguir disponiendo de sus piscinas. En Lloret de Mar, por ejemplo, los hoteleros han comprado una desalinizadora de 1,5 millones de euros para abastecer las piscinas.
Vacaciones en Cataluña: Los huéspedes deben esperar restricciones
Enric Dotras, responsable de la asociación hotelera, subraya la urgencia de esta medida: "Es nuestra única oportunidad de mantener las piscinas abiertas mientras dure la emergencia por sequía". Pero no todos los hoteles pueden permitirse este lujo. Algunos ya han anunciado que mantendrán cerradas sus piscinas y zonas wellness durante las vacaciones de Semana Santa.
El servicio meteorológico español no tiene ninguna explicación sobre el motivo exacto de tanta sequía. Sin embargo, el área metropolitana de Barcelona lleva tres años sin vientos que traigan nubes y humedad. Las desalinizadoras de la zona funcionan continuamente para producir agua potable a partir del agua de mar.